Domingo del Ciego
Hoy la Iglesia celebra el milagro de la curación del ciego de nacimiento. Si el elemento simbólico de la perícopa del Domingo anterior fue el agua, ahora se suma la luz1 – “Tenemos que trabajar en las obras del que me ha enviado mientras es de día; llega la noche, cuando nadie puede trabajar. Mientras estoy en el mundo, soy luz del mundo.” Jesús hace barro con su saliva y unta los ojos del enfermo con este barro, evocando de manera directa la acción creadora del hombre presente en el elato del Génesis (2:7).